Mejorar la calidad de vida de las personas con diagnóstico de cáncer de
cualquier tipo desde el diagnóstico.
Aliviar los síntomas que se presentan durante la enfermedad según la
prioridad manifestada por el paciente.
Intervenir a la familia durante la enfermedad oncológica, brindando el
soporte necesario para mejorar su calidad de vida y disminuir el impacto
de la evolución de la enfermedad.