Un diagnóstico de cáncer es un evento de gran impacto en la vida de las personas. Confronta al paciente con la vulnerabilidad y produce la aparición de miedos e incertidumbres, circunstancias que pueden generar diversos grados de estrés, ansiedad y conmoción emocional.

Existen terapias de apoyo o acompañamiento que permiten ayudar a los pacientes y familiares frente a estas situaciones, mejorando su bienestar emocional. Aquí es donde la Arteterapia puede ser muy beneficiosa permitiendo a los pacientes usar el lenguaje del arte y la creatividad como un canal de comunicación y expresión de sus emociones.

AUTORRETRATO EN EL ESPEJO

Toma un espejo y obsérvate en él durante algunos minutos y con lápices de colores (plumones, de madera o crayones) y tu croquera o cuaderno ve realizando lo siguiente:

Dibuja aquello de ti que te llama más la atención, pueden ser rasgos que siempre te han acompañado o puede ser algo que es nuevo en tu rostro.
Dibuja como lo sientas, no necesita ser exactamente igual, quizás hasta puedas incluir color y formas que sean más bien una metáfora de tu mirada, de la inflexión de tu boca o de lo que significan algunas marcas en tu frente.
Una vez que hallas terminado de realizar tu “retrato”, ve reflexionando y respondiendo a las siguientes preguntas, las puedes escribir junto a tu retrato o en una hoja de tu cuaderno.
- ¿Con qué te identificas al final del ejercicio?
- ¿Qué reconoces como herencia/ huella cultural/ historia en tu rostro?
- ¿Qué es nuevo en tu rostro y sientes que ha sido un cambio hoy?
- ¿Qué emociones y/o estados de ánimo distingues?
- ¿Cuál es tu mayor desafío transmitido en tu autorretrato?
Puedes dejar tu cuaderno para realizar esta actividad cada vez que lo desees y seguir profundizando en tu reflexión.
Y también puedes compartir con otros familiares, amigos esta actividad y tu experiencia en ella.

El poder de la Arteterapia para pacientes oncológicos